Nueva York, EU || La comisionada de la Policía de Nueva York, Jessica Tisch, calificó como “uno de los crímenes más depravados que una persona puede cometer”, el brutal homicidio de una mujer en uno de los vagones del metro de la ciudad, perpetrado en la mañana del domingo.
La víctima es una mujer que fue quemada viva por un guatemalteco, con estancia ilegal en Estados Unidos e identificado como Sebastián Zapeta-, que pasó al lado de ella mientras esperaba dentro la estación del metro Coney Island-Stillwell, y le prendió fuego a la ropa. Las llamas se propagaron en cuestión de segundos hasta causarle la muerte a la víctima, que no ha podido ser identificada.
El sospechoso, no solo con haber cometido el asesinato, además se sentó en una banca a ver el cuerpo consumirse por el fuego.
El migrante ilegal estuvo en la escena del crimen en el mismo momento que las autoridades llegaron; fue capturado varias horas después en la ruta F en el área de Brooklyn.
La Patrulla Fronteriza de Estados Unidos en Sonoita, Arizona, encontró a Sebastián Zapeta-Calil el 1 de junio de 2018 y le entregó una orden de deportación acelerada y las Operaciones de Ejecución y Deportación lo expulsaron de los EU a Guatemala el 7 de junio de 2018.
Sin embargo, Zapeta reingresó ilegalmente de nuevo a los Estados Unidos en fecha y lugar desconocidos.